En los últimos años, las redes sociales se han convertido en una alternativa seria a la inversión publicitaria. Tanto es así, que hoy día es rara la marca que no tiene presencia propia en Internet o que carece de un perfil en una red social como Twitter, Facebook, Tuenti, etc.
En las últimas semanas, el caso más sonado ha sido el de Pepsi, anunciando que retira la publicidad de su bebida de la Super Bowl tras más de 20 años utilizando este evento deportivo, con altísimos índices de audiencia en Estados Unidos, como soporte publicitario.
La apuesta de Pepsi y otras marcas por utilizar los medios online -y en especial las redes sociales- se debe, entre otras cosas, a su rentabilidad, a la capacidad de segmentación por públicos objetivo, a la mayor notoriedad de marca, e incluso a la potencialidad de la publicidad tradicional… Innumerables razones que ponen de manifiesto que ejemplos como el de Pepsi son sólo el comienzo de una nueva era en la publicidad: llega el turno de la publicidad online.
En las últimas semanas, el caso más sonado ha sido el de Pepsi, anunciando que retira la publicidad de su bebida de la Super Bowl tras más de 20 años utilizando este evento deportivo, con altísimos índices de audiencia en Estados Unidos, como soporte publicitario.
La apuesta de Pepsi y otras marcas por utilizar los medios online -y en especial las redes sociales- se debe, entre otras cosas, a su rentabilidad, a la capacidad de segmentación por públicos objetivo, a la mayor notoriedad de marca, e incluso a la potencialidad de la publicidad tradicional… Innumerables razones que ponen de manifiesto que ejemplos como el de Pepsi son sólo el comienzo de una nueva era en la publicidad: llega el turno de la publicidad online.
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